Bajo la alargada sombra de Hierro
“¿Dónde está Del Piero? ¡Se lo ha comido Hierro!”. Este cántico resonaba bajo la ostentosa mirada de la Cibeles el 21 de mayo de 1998. El Real Madrid acababa de recuperar su cetro continental. Volvía a reinar en Europa y Fernando Hierro, el Kaiser de la defensa blanca, había completado un partido tan perfecto que en los últimos 30 minutos la Juve apenas llegó a tirar a puerta.
Fernando Ruiz Hierro lo fue todo en el Madrid. Desde centrocampista goleador, hasta rey del centro de la defensa, además de amo y señor del vestuario y cáncer del mismo para muchos sectores críticos. Su dedo amenazante ante los árbitros imponía respeto y siempre se le concedieron licencias que a otros no se les permitían. Rivaldo aún guarda recuerdos del malagueño en forma de cardenales en sus castigadas piernas. Pero fue el mejor central en los últimos años. Y quizás, por qué no, en toda la historia del Madrid.
m
Tras su retirada su vacío fue demasiado amplio. Raúl Albiol es la última adquisición del Real Madrid para intentar cubrir ese hueco. Un central que ha destacado en el Valencia y que ha acudido normalmente a la selección, eso sí, lejos siempre de la titularidad. Credenciales insuficientes a priori para rellenar un hueco tan grande. A su favor, Albiol tendrá a su lado a uno de los mejores centrales del mundo, Pepe, siempre y cuando su locura transitoria no afecta a su juego. Quizás sea un jugador de características parecidas al portugués. Central alto, estilizado, no exento de técnica, pero carente de la velocidad propia del portugués. El reto es grande, aunque por otra parte el listón no está muy alto. A parte de sonreír estupendamente y mostrar una extraordinaria actitud de deportista en su vida privada, el legado de Cannavaro en la defensa del Madrid es más bien pobre.
m
A Albiol le va a costar bastante la adaptación a un club de la magnitud del Real Madrid. El tan famoso murmullo que acompaña a los defensas que no son del agrado del Bernabeu puede amenazar con aparecer en algún momento, como ya le ocurriera a los Julio César, Iván Campo, Secretario o incluso Marcelo en fechas recientes. Si hubiera que buscar un símil entre los últimos centrales que han desfilado por el Bernabeu en la última década posiblemente es más acertado sería el de Iván Helguera, el alumno aventajado de Hierro. El cántabro fue fundamental en muchos de los títulos de Real Madrid, con un excelente manejo del balón que le sirvió para jugar alguna temporada de medio centro, buen juego aéreo y capacidad de mando.
m
El defecto más notable de Helguera, el tremendismo en alguna de sus acciones y la desesperación en el campo que le hacía más que digno cliente de un centro psiquiátrico, no parecen defectos constatados en Albiol, un tipo tranquilo hasta en los mayores momentos de euforia. “Mi sueño siempre fue jugar en el Valencia”, dijo en su presentación con el Real Madrid.
2 comentarios:
Me parece demasiado caro para triunfar en el madrid. ojalá me ekivoke, pero creo q no dará la talla. Tony
la desesperación en el campo que le hacía más que digno cliente de un centro psiquiátrico!!! jajajja, Ahi estuviste inmenso, pero tengo que reconocer mi debilidad por el amigo Iván Helguera.
Pueden compenetrarse bien en la defensa Pepe y Albiol, pero me da un poco de miedo la defensa formada por Ramos,Pepe,Albiol y Marcelo. Los veo poco consistentes, espero que me equivoque.
Publicar un comentario